Las aspiradoras se han convertido en un artículo necesario en el hogar moderno, y sin embargo, la aspiradora moderna tal y como la conocemos sólo se hizo popular a finales del siglo XIX.
Antes de eso, era difícil limpiar las alfombras o el suelo o eliminar el polvo y la suciedad que se habían acumulado en la casa. Afortunadamente, en 1901 se presentó por primera vez el concepto de aspiradora, aunque de una forma mucho más rudimentaria de la que conocemos hoy.
El primer dispositivo mecánico de limpieza
El antecesor de la aspiradora fue un dispositivo conocido como barredora de alfombras, inventado en 1860 por Daniel Hess, de Estados Unidos.
Este invento utilizaba el flujo de aire para aspirar la suciedad y los desechos de las alfombras y el suelo, y era una forma eficaz de mantener las casas relativamente libres de polvo y suciedad.
Por desgracia, el aparato no tenía manera de recoger la suciedad y los residuos que aspiraba, por lo que el usuario tenía que recogerlos y desecharlos manualmente.
Primera aspiradora eléctrica
La primera aspiradora eléctrica eficaz fue inventada por un hombre de Ohio (EEUU) llamado Murray Spengler en 1901, aunque su patente se concedió siete años después de que se concediera la de Hubert Cecil Booth.
La aspiradora de Booth funcionaba con un motor de explosión interna, y era tan grande que tenía que montarse en un carrito de caballos. A pesar de ello, era muy eficaz no sólo para eliminar el polvo y la suciedad de las alfombras y el suelo, sino también para producir aire más limpio que el disponible hasta entonces en las viviendas.
El desarrollo de la aspiradora
A lo largo del siglo XIX, varios inventores empezaron a experimentar con diferentes conceptos de aspiradoras. Sin embargo, no fue hasta 1901 cuando Hughes Whirlwind inventó la primera aspiradora eléctrica lo bastante pequeña como para poder moverse por la casa.
A partir de ahí, se empezó a desarrollar la aspiradora moderna, que pronto se convirtió en un artículo popular para la limpieza del hogar.
La aspiradora moderna
Hoy en día, las aspiradoras se consideran herramientas esenciales en el hogar moderno. No sólo ayudan a mantener limpias las alfombras y los suelos, sino que también contribuyen a mantener el aire que respiramos en nuestros hogares limpio y libre de alérgenos, bacterias y otros contaminantes.
Esto no habría sido posible sin los inventos de las primeras aspiradoras mecánicas y eléctricas de los siglos XIX y principios del XX. Sin estos inventores, aún tendríamos que usar barredoras y otros métodos ineficaces para limpiar nuestras casas.
Debemos un gran agradecimiento a quienes tuvieron la primera idea de la aspiradora, y podemos agradecerles que hayan mejorado la calidad de nuestras vidas con sus inventos.
Ahora, todo el mundo puede disfrutar de un hogar limpio y sano gracias a los avances tecnológicos conseguidos en la aspiradora.